lunes, 30 de diciembre de 2013

Retrato

Caminas solo, porque el camino es estrecho
No te da miedo pisar los charcos, pues llevas zapatos de goma.

Has vendido cosas cuando necesitabas plata, cambiaste las laminitas repetidas y suplicaste por las que eran difíciles de sacar.
Llegaste justo a la hora del cierre y te devolviste llorando, no pediste que te dejaran pasar porque sabías que podías haber llegado más temprano, pero despertar te cuesta.
No le contarías tus sueños a nadie, porque la gente es insensata y van a pensar que son verdades.
Te arrepientes de muchas cosas y la mayoría de las veces, cuesta demasiado pedir perdón. Tienes amigos, ellos saben quienes son.
La oscuridad te da miedo y tus padres nunca fueron contigo lo que son con tus hermanos.
Sabes que darías más, si la situación lo mereciera, mientras, sonríes todos los días porque encuentras motivos.
Eres sincero

Recuento

Ya me alejé y volví,
ya vi el sol, me quemé la cara,
me resequé la piel, me jodí la retina
Ya planté flores y se las robaron
Ya me quitaron el puesto
Guardé rencor y olvidé

Ya fui víctima de intentos de asesinato
Fui a funerales, míos y ajenos,
Lloré a los de lejos y alejé a los de cerca
Ya tomé lo que no es mío y tuve que devolverlo
Manché ropa recién comprada
Ya rompí porcelana cara
y quise pegarla pero perdí pedazos

Ya me corté y no salió sangre,
Morí por una mirada, resucité
Lloré un río y rescaté al que se ahogaba
Caminé con un zapato despegado
Me caí por los cordones sueltos

Ya me colé en filas
Me acusaron y fui salvada
Ya mentí y me creyeron
Ya pedí perdón y no me lo dieron
Me condenaron

Ya me dejaron para siempre
Volvieron y yo estaba
Ya me fueron buscando y me había mudado
Me empujaron y no hice nada
Dejé libros a medias, se me olvidó patinar

Ya rompí corazones y remendé el mío
Me perdí entre temores
Ya soñé despierta, abrí puertas
Cerré ventanas
Ya camine tranquila,
Ya me cuidé la espalda.