miércoles, 8 de julio de 2015



duele que haberte me  perdido admito                                                                                                         

mañana transparente
después de una cena extendida y sentida aún más larga por los comentarios puntiagudos de tu madre
aún recuerdo su voz fucsia flúor
todo lo que no quiero ser
en una mujer
que ni siquiera tiene la sensatez de ser gorda
para inspirar un poco de ternura
no
es flaca
flaca y filosa

perdido que me duele haberte admito

despierto
sabiendo que me espera un cronograma frío
y una cocina que calienta muy lento
un baño que debería ser más blanco
una montaña arcoíris para el laundry
me acompañan sonidos lejanos
mañanas de otros


que me haberte admito perdido duele







tuve un sueño
volvía a casa de Manzanillo
con las rodillas saladas
Salomón me lamía la arena de los tobillos
me miraba aterciopelado
tenía los ojos de un marrón dulce
siempre me recordó los tuyos

haberte me admito que duele perdido

subía las escaleras y te encontraba hecho almohadas
jugando a matar zombis
me acostaba en tu espalda
te llenaba de besos
podían pasar días
o no pasar el tiempo en absoluto
el sonido de los zombis
caricias entrecortadas
arena
y la avenida 5 pisos más abajo

duele me perdido que admito haberte

esas caricias ya estaban envenenadas
con adioses

admito 

No hay comentarios:

Publicar un comentario