viernes, 13 de enero de 2017

Dormitaba bajo un techo de lentejuelas verdes
Era feliz porque tenía en frente el mar caoba
en unos ojos grandes

Quisiera que me mirara siempre
así se pasaría con rapidez
el efecto de novedad que tiene
el primer día de primavera después de un invierno inclemente
y lo trataría, como trata la gente
al mar
en las ciudades del caribe:
como algo agradable que está siempre
presente y disponible
como un hogar
que no causa euforia
ni sorprende
como un amor sereno
como algo más real

No hay comentarios:

Publicar un comentario